Crítica de "Spring Breakers" : la ruptura total de la inocencia

Spring Breakers es una película de género dramático de Harmony Korine, interpretado por Selena Gómez, Vanessa Hudgens, Ashley Benson y Rachel Korine en los papeles protagonistas y la actuación co-protagonista de la mano de James Franco.

La trama principal de la película gira en torno a las vacaciones de primavera de cuatro jóvenes, y hasta aquí podemos decir que el tema es bastante típico, después podemos observar que la trama girará en torno a como estas cuatro jovencitas encuentran la diversión y la manera de llegar a ello, haciéndolo de formas muy poco ortodoxas, e inclusive pudiendo ser muy polémicas.

Spring Breakers es un análisis de la juventud y de cómo están actualmente vistos en la cultura popular, mostrando imágenes incluso rozando la inmoralidad. Uno de los puntos fuertes es la utilización de la imagen de "chica disney" de Selena Gómez, convirtiéndose en la película en una más de estas jóvenes, a diferencia de su compañera Vanesa Hudgens, Selena Gómez sigue desempeñando el papel de chica 'buena' incluso haciendo de chica mala, demasiado predecible.

Una de las mejores cosas de la película es la actuación sin duda de James Franco, dejando de lado sus trajes y educación para convertirse en un rapero de poca monta y totalmente repulsivo, totalmente brillante. Después también podemos destacar la actuación de Vanessa Hudgens que cumple totalmente con su papel de una chica fuera de control que se ve inmersa del todo en temas ilegales.

Lo peor de la película es la poca profundidad que tiene respecto a un tema del que se puede sacar mucho jugo, simplemente nos muestra una realidad pero sin más, como si de un reportaje se tratara, pese a tocar temas como las drogas, el alcohol en los jóvenes y los delitos. Los personajes son demasiado planos en muchas ocasiones y apenas atraen al público. Creo que faltó un ápice de profundidad tanto de los personajes como de las situaciones.

En conclusión, es otra película que intenta mostrarnos la parte negativa de la sociedad y sus excesos en la actualidad, pero creo que es prescindible, lo único por lo que merece la pena verla es por la actuación de James Franco. También sirvió de impulso de transición en la carrera de Selena Gómez y su madurez en el mundo del espectáculo. La nota final es un 5. Sin duda, esta película no es malísima pero es bastante mejorable.